Columna

Buena semana para Jenniffer González

“No obstante, la dinámica entre la política y el gobierno es compleja y cambiante. Pueden estar bien un día y al siguiente nacer una controversia“

Alex  Delgado
Por Alex Delgado 2 de junio de 2025 • 5:23 a. m. AST
4 minutos
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“Las noticias cambian en cualquier momento”, decimos en NotiUno 630. En las semanas previas a esta, la gobernadora Jenniffer González no tuvo buenos días, principalmente por el tema de los nombramientos de Verónica Ferraiuoli y Arthur Garffer para el Departamento de Estado, así como el de Janet Parra para el Departamento de Justicia. En menor escala de discusión, también tuvo que retirar varios nombramientos de personas designadas por aparentes controversias que saldrían a la luz pública en los procesos de confirmación.

Nunca me la han puesto fácil”, dijo González en su mensaje del pasado jueves ante la Legislatura. Sin duda sus propios designados la ubicaron en una posición muy complicada y no se la pusieron fácil al ocultar información que trascendería en los procesos de vistas públicas. Eso en el mejor de los casos. En el peor, si la Fortaleza sabía de esos “pecadillos” y decidió ir adelante con las designaciones, pues fue la propia Fortaleza quien no se la puso fácil. Pensemos que fue la primera.

En ese proceso de pulseo con el Senado, el presidente de ese cuerpo, Thomas Rivera Schatz, salió “airoso”. En la proyección pública la gobernadora, con su defensa a los nominados, lució obstinada. De hecho, en la retirada de los nombramiento no pudo contener la tentación de criticar a Rivera Shatz, que eventualmente seguirá teniendo el poder de fiscalización y aprobaciones de medidas de administración. 

El miércoles 21 de mayo la gobernadora indicó que se tomaría su tiempo en designar funcionarios para Estado, Justicia y el Deprtamento del Trabajo. Al día siguiente el líder senatorial advirtió que su cuerpo podría confirmar las personas designadas interinamente a esos puestos y la mandataria le contestó que no iba a actuar “bajo amenazas de nadie”. Así de tensa se puso la situación entre ambos. Aunque le indicó  a Rivera Schatz que se tomaría su tiempo en designar personas para esos puestos, la realidad fue que 4 días después terminó haciendo las designaciones de la alcaldesa de Gurabo, Rosachely Rivera, para Estado y de la ex jueza Lourdes Gómez Torres para Justicia. También hizo designación oficial para el Departamento del Trabajo, cuyo nombramiento original había tenido que retirar. Rivera Schatz les dió su “bendición” pública.

De otra parte, la controversia con las tablillas para fourtracks no le ayudó a la primera mandataria, más bien pareció unir al país, pero contra la propuesta. Si fue algo traído para distraer la atención de otros temas más importantes y controversiales, le funcionó.

Las designaciones ocurrieron iniciando la pasada semana, por lo que la gobernadora comenzó  la misma con noticias positivas, lo que provocó que las aguas turbulentas comenzaran a bajar. Se dieron antes de presentar el Mensaje de Estado a la legislatura. De igual forma, antes de ese evento, se dió una reunión entre ella y los presidentes legislativos, destacando la presencia de Rivera Schatz. Parecieron limar asperezas, al menos por el momento.

No voy a entrar en el contenido del mensaje de Estado porque es más o menos lo mismo de siempre. En todos los mensajes se habla de lo bien que “estamos” y cuánto se ha progresado, aunque la historia y el tiempo ha sacado a flote todo lo contrario, una historia muy distinta a “estamos muy bien”. Ciertamente Jenniffer González está iniciando su gobernación y sería injusto cualificar la misma sin brindarle la oportunidad de demostrar si cumplió o no.

En términos de proyección durante el mensaje, González ejerció sus buenos oficios. Lució segura, comunicó y no tuvo percances, o al menos no se notaron en la transmisión mediática, si es que los hubo.

Entre las designaciones, la reunión con los presidentes legislativos y el manejo del mensaje el pasado jueves, luego de unas semanas turbulentas, la gobernadora Jenniffer González tuvo una buena semana.

No obstante, la dinámica entre la política y el gobierno es compleja y cambiante. Pueden estar bien un día y al siguiente nacer una controversia. La  noticia, obviamente, cambiará en cualquier momento porque es lo natural en estas arenas movedizas. ¿Cómo lo manejará La Fortaleza? Pues ya lo analizaremos.

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Por Alex Delgado

Periodista y columnista con 25 años de experiencia en los medios de comunicación

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